Frente a las agresiones suscitadas en la cuenca del río Santiago en contra del Gobierno Territorial Autónomo de la Nación Wampis (GTANW) por parte de grupo de personas poco comprometidas con su nación y la comunidad, nos pronunciamos expresando nuestra solidaridad con los hermanos wampis, llamándole la atención al Estado peruano, actuar de inmediato frente al saqueo indiscriminado de la madera, entre las cuales está la especie caoba que es vedada oficialmente para evitar su extinción.
El cuidado del ambiente, los recursos naturales y de la biodiversidad en general corresponden a la ciudadanía, a la comunidad organizada y sobre todo al Estado; sin embargo, es preocupante la ausencia de la fuerza del orden pública cuando desatiende a la población que pide apoyo frente a la presencia de elementos que, usando su fuerza matonezca, intimida y agrede todo tipo de iniciativas que van en defensa de la ley y de la vida silvestre, como está ocurriendo con la noble acción emprendida por el GTANW en el río Santiago.
Exhortamos a los diversos entes del Estado, al gobierno central, regional y local, que en una acción coordinada con el GTANW, intervengan para detener la extracción ilegal de caoba en la zona y restauren el orden antes que la situación se convierta en caos social y sea muy tarde para controlar y reparar.
El saqueo ilegal de los recursos en la amazonia es intenso, entre los cuales está la actividad minera y la tala de madera. Si se presencian denuncias de la población organizada es gracias a las acciones que toman por iniciativa propia. En respuesta, los extractores responden asesinando a los líderes usando esta modalidad para intimidar y mantener callados a los defensores de los derechos humanos y del ambiente. El Estado al quedarse callado aparece para la población como cómplice de esta práctica nefasta.
Esperamos que la situación sea atendida de inmediato.
Chiriaco, 19 de junio de 2022